• La delimitación de la zona con presencia permanente de oso pardo se irá ajustando cada año en base al programa de seguimiento de esta especie, de forma que si la población de oso se expande, el dispositivo de prevención de daños también se ampliará
  • Las indemnizaciones por daños acreditados del oso sobre la ganadería, se mantendrán tanto dentro como fuera de la zona permanente de oso y tanto para el ganado local como forastero

 

El programa de seguimiento del oso pardo en Catalunya ha permitido delimitar la zona con presencia permanente y continuada de estos animales. Esta zona afecta la totalidad de la Val d’Aran y la franja norte del Pallars Sobirà, es decir, les Valls d’Àneu y las cabeceras de la Vall de Cardós y la Vall Ferrera. Fuera de este ámbito, se puede dar la presencia de oso pero de forma muy puntual y esporádica.

En base a esta información y teniendo en cuenta que este año finalizan las ayudas del proyecto europeo Piroslife destinados a la prevención de los daños que pueda ocasionar el oso al ganado, la Generalitat concentrará los recursos disponibles en las zonas donde existe riesgo para garantizar a los ganaderos afectados los mismos estándares de protección del año pasado.

En años anteriores, los recursos disponibles se habían dispersado, haciendo una inversión similar en agrupamiento de rebaños, contratación de pastores y vigilancia de ganado ovino, tanto dentro de la zona afectada por la presencia continuada de oso, como fuera de esta zona. En concreto, el 2017, se destinaron 112.000 euros por este concepto en la zona de riesgo y 85.000 euros en zonas donde la presencia de oso es sólo puntual y esporádica.

Para el 2018, en la zona con presencia permanente de oso pardo la Generalitat asegurará la totalidad del dispositivo de prevención. Se están estudiando para este año algunas mejoras de ampliación de los periodos de vigilancia de algunos agrupamientos y de los efectivos destinados a la vigilancia del ganado mayor. Aun así, fuera de esta zona no se destinará dinero para el agrupamiento y vigilancia de rebaños. Esto afecta los rebaños de la parte baja del Pallars Sobirà y algún rebaño del Pallars Jussà y el Alta Ribagorça bajo la gestión de la FECOC.

Por otro lado, las indemnizaciones por daños acreditados del oso sobre la ganadería, se mantendrán, tanto dentro cómo fuera de la zona permanente de oso, y tanto para ganado local como forastero.

La delimitación de la zona con presencia permanente de oso pardo y su vigencia

El mapa de zona permanente de oso pardo se ha obtenido mediante la suma de todas las localizaciones del oso durante el periodo 2013-2017 y a partir del kernel 95%, que es el espacio en el cual hay un 95 % de probabilidad de detectar un indicio de oso. Posteriormente, para mayor seguridad, se ha añadido una franja o buffer perimetral adicional de 5 Km alrededor.

Las localizaciones se han basado en el conjunto de indicios confirmados mediante contactos fotográficos (con cámaras de fototrampa), detección de huellas, observaciones validadas por expertos, excrementos analizados, muestras de pelos recogidos en trampas y depredaciones confirmadas.

Es importante remarcar que la delimitación de la zona con presencia permanente de oso pardo no es rígida y se irá ajustando cada año en base al programa de seguimiento de esta especie. Si la población de oso se expande, el dispositivo de prevención también se ampliará, de forma que rebaños que a día de hoy quedan fuera del programa de prevención de daños serán incorporados en el futuro si el riesgo de sufrir daños así lo justifica.

Distribución del oso pardo en el conjunto de los Pirineos.

 

El programa de prevención

En cuanto a la ganadería ovina, el programa ofrece siete agrupamientos de ganado vigilados: los de Gausac-Casau, Bagergue y Beret, en el Aran; y los de Isil, Tavascan, La Bonaigua y Boldís-Àreu, en el Pallars. El sistema de vigilancia cuenta con la presencia de pastores y ayudantes durante todo el día, incluidas las horas nocturnas, en que el ganado queda encerrado en cercados electrificados, protegido por perros de protección y junto al refugio del pastor. También ofrece, para este ganado, un seguro por accidentes y otros daños que pueda sufrir.

Además, incorpora inversiones para proteger el ganado como el arreglo de cabañas para los pastores, traslado de barracones y cabañas prefabricadas, compra de sistemas eléctricos autónomos, mobiliario y utensilios, etc.

En cuanto a la ganadería vacuna y equina de los ganaderos locales, ofrece la contratación de pastores de vacas y asnos  de apoyo en la vigilancia y detección de posibles incidencias que puedan surgir a los animales durante su estancia en los pastos de verano.