El consejero de Territorio y Sostenibilidad ha explicado que la reunión ha servido para analizar el protocolo y detectar dificultades de aplicación de la fase 2
• Calvet ha puesto en valor el Protocolo de intervención con osos en los Pirineos, aprobado en la Comisión Estatal de Patrimonio Natural y la Biodiversidad en octubre de 2018

El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, junto con el Director General de Políticas Ambientales, Ferran Miralles, ha participado en la reunión de trabajo sobre el Protocolo de intervención con osos en los Pirineos con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, el consejero aragonés, Joaquín Olona, y el síndico de Aran, Paco Boya. En esta reunión se ha analizado el Protocolo de intervención y se ha detectado que hay una serie de dificultades de aplicación en la fase 2.

El consejero se ha reafirmado en el protocolo existente. “De la voluntad de preservar la presencia del oso y que esta no altere la actividad humana, sea el turismo o la ganadería extensiva, surgió un protocolo de intervención en octubre del año pasado, que se hizo en un tiempo record y por parte de todas las administraciones (también Aragón y Navarra). Este protocolo marca de manera muy clara como actuar cuando hay ejemplares con un comportamiento anómalo reiteradamente depredador o agresivo, como parece que es el caso de Goiat o Cachou”, ha explicado el titular del DTES.

En la aplicación del protocolo y, en concreto en la fase 2, Calvet ha dicho que, en el marco del grupo de trabajo del oso “se impulsará una mejora del protocolo de intervención, en la fase 2”. En cuanto a esta fase, en primer lugar, se ha decidido que el grupo de trabajo que ha elaborado el protocolo, la revise. Y, en segundo lugar, “hemos concretado que se tienen que constituir unos equipos de intervención que permitan hacer un seguimiento continuado tanto temporal como físico de estos ejemplares que tienen un comportamiento anómalo.”

En el caso de Cataluña, ha detallado Calvet, “ya tenemos dos equipos de intervención constituidos por personal de la Generalitat y del Conselh Generau d’Aran para que puedan operar las 24 horas del día. Pero en el caso de Aragón no existe este equipo de intervención y, en el de Francia, no hay este protocolo. Hoy hemos acordado pues la constitución de estos equipos de intervención para continuar aplicando el protocolo aunque el oso pase de un territorio al otro”, con la intención que este protocolo no tenga fronteras, para ser así el máximo de efectivo.

El consejero ha insistido que “queremos que la presencia del oso sea compatible con la actividad humana y por eso hay que mejorar el protocolo existente”.